Los
populares denuncian que el Ayuntamiento no considere la situación
económica de los vecinos cuando plantea multarles por no ejecutar
una notificación de obras
El PP considera despiadado obligar
a los vecinos a la ejecución y pago de unas obras en sus fachadas
que el Consistorio valora muy por debajo de su coste real, y que en
muchos casos innecesarias
El Ayuntamiento se convierte en Juez y jurado. |
La difícil situación económica que
siguen viviendo algunos vecinos de Oliva ha pasado por desapercibido
para el concejal de urbanismo, puesto que en lugar de poner
facilidades para que estas familias puedan superar su difícil
situación, el Consistorio ha decidido ignorar la realidad y dar el
golpe con una nueva jugada recaudatoria.
Algunos vecinos han recibido
recientemente en sus hogares un requerimiento de ejecución de obras
para mantener las fachadas de sus casas en “adecuadas condiciones
de seguridad, salubridady ornato públicos”. Asimismo, esta orden
indica detalladamente las actuaciones concretas que deben costear por
su cuenta, determinando una periocidad máxima menor a un mes para
realizar dichas obras y valorando el gasto muy por debajo del coste
real.
Sin embargo, lo que para los populares
resulta indignante es que el Ayuntamiento amenaze con “multas
coercitivas” a los vecinos en el caso de que no se realicen dichas
actuaciones en los términos y plazos determinados: una sanción que
curiosamente sumaría la cantidad que el Consistorio presupuesta para
el coste de las obras en cada fachada.
Para el PP, la concejalía de urbanismo,
al frente del BLOC/Compromís, ha decidido de nuevo realizar una
huída hacia delante, sin tener en cuenta quién puede verse afectado
por esta medida totalitaria, y que en este caso son los vecinos que
no pueden asumir el coste de estas obras, y menos todavía en el
plazo estipulado.
Los populares entendemos que los
ciudadanos mantengan en perfecto estado de conservación sus
vivendas, pero para nada defendemos esta medida recaudatoria e
impositiva sin considerar la situacion de las familias y sin tener un
plan de adecuación de viviendas, con ayudas previstas y facilidades
de pago, y más cuando el Ayuntamiento tiene en estado de abandono y
grave peligro edificios como el Cantro Olivense.
El Ayuntamiento vuelve a olvidarse de los
vecinos para los que trabaja, sin considerar el lastre que conlleva
esta imposición en sus economías domésticas. El PP exige al
Consistorio que rebaje su afán recaudatorio y que empiece a trabajar
por los vecinos, considerando si la importancia de esas obras es más
importante que la calidad de vida de los vecinos de Oliva.